Teatro que hace ruido
El Taller del Grupo "Urraka! - Música con objetos" volvió por segundo año consecutivo a Rafaela con una nueva propuesta integradora.
(Por Mauro Theler). - Trabajadores con mayúsculas. El grupo "Urraka! - Música con objetos" tuvo una participación más que activa en el Festival de 2009. Primero realizaron Urraka Taller en el Centro de Integración Comunitaria del barrio Monseñor Zazpe para chicos de ese barrio, Virgen del Rosario, Mora, Italia, Barranquitas y San José.
Paralelamente Hermes Gaido y Luciano Rosso hicieron dos presentaciones de la obra en proceso, "Un Poyo Rojo". Y como si eso fuera poco tuvieron la responsabilidad de cerrar el Festival 09 con la impactante obra colectiva "Kutumpra". Una labor para aplaudir de pie.
Este año no podían ser menos. Empezaron a trabajar horas antes de la inauguración oficial del festival en el Salón de Usos Múltiples del Barrio 2 de Abril. El taller de este año está a cargo de cinco de los siete integrantes del grupo: Emmanuel Calderón, Cristian de Castro, Roberto González, Mariela Herlein y Luz Macías.
El viernes fue el tercer día de ensayo y la tercera vez que nos acercamos a curiosear el trabajo de los "urrakos" en el Salón de Usos Múltiples del barrio 2 de Abril, en el extremo sureste de la ciudad.
Allí participan más de 50 chicos del barrio y participantes del año anterior provenientes del extremo norte (Zazpe, Mora, Barranquitas y San José). La mayoría de ellos participó en el taller del año pasado.
Las edades oscilan entre los 6 y los 14 años con mayoritaria participación de menores de 10 años. En esta oportunidad se suman para colaborar y completar el grupo Hermes Gaido y Luciano Rosso, que presentaron el jueves una nueva versión de "Un Poyo Rojo".
Los actores tienen un profundo compromiso con la tarea que realizan.
Prefieren no dar notas mientras llegan los chicos porque es un momento muy importante. La bajada del colectivo que viene desde Monseñor Zazpe con gran parte de los chicos, asistentes sociales y colaboradores está cargada de afecto. Los chicos saludan con besos a todos los presentes.
No es sólo teatro lo que se desarrolla en este espacio, sino también las relaciones humanas.
Dentro del taller se transmiten técnicas rítmicas de expresión a través de la percusión del cuerpo y la voz como objetos: palmas, zapateo, golpes en el pecho, gritos y gestos. Los chicos que minutos antes estaban a los gritos escuchan concentrados las consignas de los "profes". Después de tres días la coordinación de diferentes improvisaciones es más que satisfactoria.
Para Mariela Herlein este es su quinto Festival. Ha participando en distintos proyectos en las anteriores ediciones. Su visión del mismo es muy positiva, para ella ya tiene una proyección que trasciende los límites nacionales. Por su parte lo que hacen con esta experiencia es acercar el arte en forma de taller. "Llevar el teatro callejero o a la gorra para aquellas personas que no siempre tienen una moneda para poner en ella".
Por su parte Cristian De Castro llegó al Festival el año pasado. En San Fernando, Buenos Aires, de donde provienen varios de los integrantes, ha trabajado con talleres de percusión y zancos con chicos de barrios periféricos: "Los pibes se reenganchan con lo que les des. En barrios donde laburé vi a pibes con 14 ó 15 años tomando talleres y volví cuando tenían 18 años y seguían trabajando".
Este año la idea de unir dos barrios tiene el objetivo de hacer algo más grande. En los días de ensayo es común ver que los chicos a veces reproducen algunas cuestiones territoriales que son reflejo de la idiosincrasia de Rafaela en todos sus estamentos sociales. La pertenencia a un barrio, a un club, la incomodidad con el que nos parece diferente. Es ahí donde Urraka Taller hace más ruido. Logran que los chicos se comuniquen a través del cuerpo de una manera que parece imposible desde las palabras.
Hoy, último día del Festival, estarán participando de la muestra final a partir de las 16:30 en la plaza 25 de Mayo. Muchas cosas quedarán haciendo eco luego de esta edición, el trabajo de Urraka es el que más ruido debería provocar por crear espacios creativos allí donde otros no los pueden ver.
Links: Publicado para Diario La Opinión
Urraka! - Música con Objetos
(Por Mauro Theler). - Trabajadores con mayúsculas. El grupo "Urraka! - Música con objetos" tuvo una participación más que activa en el Festival de 2009. Primero realizaron Urraka Taller en el Centro de Integración Comunitaria del barrio Monseñor Zazpe para chicos de ese barrio, Virgen del Rosario, Mora, Italia, Barranquitas y San José.
Paralelamente Hermes Gaido y Luciano Rosso hicieron dos presentaciones de la obra en proceso, "Un Poyo Rojo". Y como si eso fuera poco tuvieron la responsabilidad de cerrar el Festival 09 con la impactante obra colectiva "Kutumpra". Una labor para aplaudir de pie.
Este año no podían ser menos. Empezaron a trabajar horas antes de la inauguración oficial del festival en el Salón de Usos Múltiples del Barrio 2 de Abril. El taller de este año está a cargo de cinco de los siete integrantes del grupo: Emmanuel Calderón, Cristian de Castro, Roberto González, Mariela Herlein y Luz Macías.
El viernes fue el tercer día de ensayo y la tercera vez que nos acercamos a curiosear el trabajo de los "urrakos" en el Salón de Usos Múltiples del barrio 2 de Abril, en el extremo sureste de la ciudad.
Allí participan más de 50 chicos del barrio y participantes del año anterior provenientes del extremo norte (Zazpe, Mora, Barranquitas y San José). La mayoría de ellos participó en el taller del año pasado.
Las edades oscilan entre los 6 y los 14 años con mayoritaria participación de menores de 10 años. En esta oportunidad se suman para colaborar y completar el grupo Hermes Gaido y Luciano Rosso, que presentaron el jueves una nueva versión de "Un Poyo Rojo".
Los actores tienen un profundo compromiso con la tarea que realizan.
Prefieren no dar notas mientras llegan los chicos porque es un momento muy importante. La bajada del colectivo que viene desde Monseñor Zazpe con gran parte de los chicos, asistentes sociales y colaboradores está cargada de afecto. Los chicos saludan con besos a todos los presentes.
No es sólo teatro lo que se desarrolla en este espacio, sino también las relaciones humanas.
Dentro del taller se transmiten técnicas rítmicas de expresión a través de la percusión del cuerpo y la voz como objetos: palmas, zapateo, golpes en el pecho, gritos y gestos. Los chicos que minutos antes estaban a los gritos escuchan concentrados las consignas de los "profes". Después de tres días la coordinación de diferentes improvisaciones es más que satisfactoria.
Para Mariela Herlein este es su quinto Festival. Ha participando en distintos proyectos en las anteriores ediciones. Su visión del mismo es muy positiva, para ella ya tiene una proyección que trasciende los límites nacionales. Por su parte lo que hacen con esta experiencia es acercar el arte en forma de taller. "Llevar el teatro callejero o a la gorra para aquellas personas que no siempre tienen una moneda para poner en ella".
Por su parte Cristian De Castro llegó al Festival el año pasado. En San Fernando, Buenos Aires, de donde provienen varios de los integrantes, ha trabajado con talleres de percusión y zancos con chicos de barrios periféricos: "Los pibes se reenganchan con lo que les des. En barrios donde laburé vi a pibes con 14 ó 15 años tomando talleres y volví cuando tenían 18 años y seguían trabajando".
Este año la idea de unir dos barrios tiene el objetivo de hacer algo más grande. En los días de ensayo es común ver que los chicos a veces reproducen algunas cuestiones territoriales que son reflejo de la idiosincrasia de Rafaela en todos sus estamentos sociales. La pertenencia a un barrio, a un club, la incomodidad con el que nos parece diferente. Es ahí donde Urraka Taller hace más ruido. Logran que los chicos se comuniquen a través del cuerpo de una manera que parece imposible desde las palabras.
Hoy, último día del Festival, estarán participando de la muestra final a partir de las 16:30 en la plaza 25 de Mayo. Muchas cosas quedarán haciendo eco luego de esta edición, el trabajo de Urraka es el que más ruido debería provocar por crear espacios creativos allí donde otros no los pueden ver.
Links: Publicado para Diario La Opinión
Urraka! - Música con Objetos
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